Diáspora
- Erika P. Roostna
- 20 ago
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Pronuncio la palabra "diáspora", rodándola lentamente en la lengua, juntando los labios, sintiendo el peso de su significado; una especie de tintineo me recorre el cuerpo, como si me reconociera a mí misma, una planta que ha soltado sus semillas al viento. Soy una de esas simientes que los vientos trajeron al Canadá.
Diáspora me sugiere estar sentada en medio de un campo florido de Dientes de león, esas flores amarillas que cunden las praderas y se trasforman en miles de semillas aladas que el viento se lleva a alguna parte.
La palabra diáspora tiene una musicalidad callada, que lleva en sus entrañas el esfuerzo de ser transportado a otro lugar donde germinar y echar raíces. Lleva toda la memoria de los orígenes, las dudas de dónde caer, el miedo de las condiciones idóneas para germinar. Somos el origen de algo nuevo, algo bueno. Una nueva forma de pensar, sin resquebrajar nuestra estirpe y fundamento.
Diáspora es hacia dónde vamos y de dónde venimos.
Y para ti ¿Qué significa la palabra Diáspora? ¿Cómo la describirías?
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